Un senador y candidato presidencial colombiano cuyo tiroteo en un mitin político recordó algunos de los capítulos más oscuros de la violencia del país alimentada por el narcotráfico ha muerto.
La familia de Miguel Uribe Turbay dijo que el político de 39 años murió el lunes en un hospital de la capital, Bogotá, más de dos meses después de haber resultado gravemente herido.
“Descansa en paz, amor de mi vida. Cuidaré de nuestros hijos”, escribió su esposa, María Claudia Tarazona, en una publicación en redes sociales confirmando su fallecimiento. “Le pido a Dios que me muestre el camino para aprender a vivir sin ti”.
Un adolescente sospechoso fue arrestado en el lugar del ataque, en un barrio obrero de Bogotá, y desde entonces las autoridades han detenido a varios más. Sin embargo, aún no se sabe con certeza quién ordenó el asesinato ni por qué. Uribe fue sometido a una cirugía de emergencia y permaneció hospitalizado en cuidados intensivos hasta su fallecimiento.
El ataque, que fue captado en múltiples videos, alarmó a los colombianos que no habían visto este tipo de violencia política contra candidatos presidenciales desde que el capo de la droga de Medellín Pablo Escobar declaró la guerra al Estado en los años 1990.
La propia madre de Uribe, una conocida periodista, Diana Turbay, estuvo entre las víctimas de ese período cuando murió durante un rescate policial tras ser secuestrada por un grupo de narcotraficantes liderado por Escobar que buscaba bloquear su extradición a Estados Unidos.